Siguiendo el objetivo de Bridgestone EMIA, para 2030 se espera que la fábrica tenga unas nulas emisiones de CO2.
Basauri sigue inmersa en su preparación del proyecto de ahorro energético con el fin de reducir sus consumos y conseguir en 2030 la descarbonización total, dejando de emitir a la atmósfera CO2. Uno de los hitos más importantes no solo de la fábrica, sino de Bridgestone EMIA.
Además, todos los años se crean nuevas iniciativas para disminuir los consumos energéticos y entre las que se están implementando este curso destaca la reconversión de las prensas de Dommo a Platten para la rebaja del uso del gas. Una transformación que empezó en 2015 y cuya previsión es que acabe en 2026, cuando la empresa verá reducidas sus emisiones de CO2 en unas 7.600 toneladas anuales y logrará un ahorro cercano al 35% menos de gas natural.
Por otra parte, también se está controlando el consumo energético en cada célula por medio de la herramienta Smart Energy, a través de la cual se puede comprobar cuánto y cómo se está consumiendo. Este sistema comenzó en 2021 y finalizará el año que viene, en 2024, cuando todos los departamentos tendrán medidores monitorizando los consumos de las máquinas.