Pasión por la industria
Nacido en Basauri (Vizcaya) hace 45 años, Iñigo López Villoslada es un trabajador del departamento de Talones, Cortadoras y Calandras, que lleva casi 20 años en la Planta de Burgos. Entró en 2003 y es uno de los encargados de supervisar las labores del sector. Por sus manos pasan los ratios de fabricación y pérdidas de las 35 células y se encarga de organizar las actividades de la jornada. A ello se suman las reuniones en planta, la realización del resumen diario y el seguimiento continuado de los proyectos que se encuentren en desarrollo. Un trabajador incansable cuya máxima es seguir mejorando la evolución productiva.